Nosotros no somos nosotros sino nuestras múltiples vidas: Las que protagonizamos; las que nunca vivimos y las que enterramos vivas. Somos nuestros episodios de sol que nos despiertan de risa, los de agua salada que brotan a mares sobre nuestras mejillas y aquellos de aire que abandonan el cuerpo suspiro a suspiro.
Nosotros, no somos nosotros, sino nuestras múltiples vidas.
Me saboreo con delicia cada una de las lágrimas de felicidad. Gracias.
A ti.